Hoy se celebra el día de Europa, una realidad que se va construyendo progresivamente, aunque la idea de una Europa Unida es muy antigua.

Cuando en al actualidad damos pasos progresivos para alcanzar una Europa unida estamos desarrollando una antiguo proyecto que hunde sus raíces en la antigüedad. La idea de la comunidad europea, en su versión moderna, nace con un ministro francés llamado Robert Schuman, quien en 1950 lanza la idea progresiva que habrá de ser desarrollada poco a poco. Y debía ser así: La Segunda Guerra mundial había terminado hacía pocos años. El suelo europeo tenía abiertas muchas heridas hechas por el odio, muertes y destrucción. Por ese motivo se debía comenzar lentamente, mediante la economía y el comercio, tal como se hizo.

Sin embargo, aquel primer proyecto fue tomando fuerza, y en la actualidad ya es una realidad, aunque no exenta de problemas. No obstante, la unidad europea se asomó a la historia con el Imperio Romano. Por las calzadas romanas, que recorrían toda Europa, como arterias de un cuerpo gigantesco, ya circulaban productos e ideas, se hablaba una misma lengua, se tenían códigos de leyes similares...

Cuando el Imperio Romano cayó, fue el Camino de Santiago la idea que aglutinó al continente. Los peregrinos que llegaban a Santiago de Compostela desde las remotas regiones, eran conscientes de estar animados por una idea común y por un estilo de vida que tenía muchos puntos en común.

En la actualidad sigue reafirmándose el sentir común. La caída del muro de Berlín ha supuesto que muchos países, que durante años han vivido en régimen comunista, se incorporen a la construcción de la casa común de los europeos. También nosotros debemos ir aprendiendo a romper barreras y fronteras. Con la originalidad de cada uno de los pueblos europeos se puede formar un continente donde reine  el diálogo, la libertad y el respeto entre todos.