En cierta ocasión, un discípulo se quejaba a su maestro:
—Maestro, siempre nos cuentas historias, pero nunca nos revelas su significado.
El maestro respondió:
—¿Te gustaría que alguien te ofreciera una fruta y la masticara antes de dártela? Nadie puede descubrir el significado de las cosas por ti. Ni siquiera el maestro.
Anthony de Mello