¿Qué puedo hacer?

Les propongo una parábola que escuché un día, no sé dónde, y que puede ayudarnos.

Dice así:

"Érase una vez un hombre que se sentía muy satisfecho con el césped de su jardín. Pero llegó la primavera y un día se dio cuenta, con tristeza, de que había otro tipo de hierbas. Se puso a trabajar para arrancarlas una a una, pero no había manera; al día siguiente todo estaba igual, de tal manera que todo el jardín se convirtió en una auténtica plaga de malas hierbas.

Entonces el hombre tuvo la idea de escribir al ministro de Agricultura, explicándole lo que pasaba y los esfuerzos que había hecho en vano, ya que todo continuaba igual. ¿Qué puedo hacer?, preguntaba. Esperó respuesta y un día le respondieron:

—Lo que puedes hacer es aprender a amar todas las hierbas.